Las cosas no habían arrancado para nada fácil en el torneo para el Pincha. Un empate en Berisso, mismo resultado recibiendo a Platense y una dura derrota visitando a Tristán Suárez, mantenían expectantes y ansiosos a todo el pueblo caserino que esperaba volver a ver algo del Estudiantes que supo pelear el campeonato pasado y estar a tiro del famoso ascenso.
Esta vez en frente tuvo a Deportivo Morón, rival que venía de ganar el clásico ante Almirante Brown y con la confianza en su máximo estado para repetir el logro en Caseros. Las cosas arrancaron mejor para el Gallo, con la pelota en los pies de Gerardo Martínez y el peligro incesante de Leonel Altobelli, quien volvió loco a toda la defensa de Estudiantes, Morón parecía ser más que el conjunto dirigido por Fabián Anselmo.
Si bien el partido carecía de oportunidades claras, Morón probó muchas veces de afuera, como a los 13´ cuando Yassogna le pegó fuerte y la pelota se fue apenas afuera del ángulo izquierdo de Ramiro Martínez. El Pincha no encontraba la pelota y se hacía un equipo muy largo, donde los delanteros estaban desconectados, el medio lo dominaba Morón y atrás se sufría ante el juego asociado de Martínez, Altobelli y Federico Domínguez.
A los 23´ llegaría la apertura del marcador. Tiro libre desde la izquierda en los pies de Gerardo Martínez, quien con una exquisita pegada la puso al palo del arquero, quien con una floja respuesta nada pudo hacer para evitar el gol de Morón. Cuando parecía que la tarde/noche iba a ser una película de terror, un minuto más tarde Nicolás Gásperi tomó de la camiseta en el área a Nahuel Benítez y Eduardo Gutiérrez no dudó en cobrar penal. El encargado de ejecutarlo fue Diego Torres, quien la cruzó de zurda y puso el empate 1 a 1.
A partir de allí Morón perdió la pelota, dejó de llegar con peligro y la figura de Gerardo Martínez dejó de tomar presencia. Con más ganas que fútbol y aprovechando el envión del gol, el Matador conseguiría ponerse arriba del marcador. Pelota larga para Martín Batallini, quien por izquierda encaró hacia el arco y tras un enganche y posterior definición cruzada, Peratta dio rebote para que llegara con el arco de frente Diego Torres y pusiera el 2 a 1. El Gallo quiso despertar pero sólo llegaba con pelotas paradas o remates desde afuera, como el tiro libre de Adrian Peralta bien rechazado por Ramiro Martínez y un remate desde afuera de Gerardo Martínez que se encontró con la gran respuesta del Mono.
Todo el juego se basó en el primer tiempo, ya que el segundo Estudiantes metió el partido en el freezer y no supo pasar mayores sobre saltos. Es más, a los 4 minutos de comenzado el tiempo complementario, Nahuel Benítez perdió un mano a mano increíble con Peratta, quizás producto de las ganas del ex San Lorenzo de convertir con la camiseta del Matador.
El juego se tornó aburrido y casi sin llegadas más allá de alguna pelota parada, Morón lo tuvo al final con una pelota que quedó boyando en el área y Otermín la encontró fusilando al arquero, quien con una magnifica respuesta, evitó el empate de los dirigidos por Giunta.
El tiempo pasó y Gutiérrez pitó el final para desatar el desahogo de todo Caseros. Estudiantes ganó con justicia por lo hecho en el primer tiempo, sobre todo después del gol de Morón, y se permite empezar a pensar en grande. Cabe destacar la gran labor de Ramiro Martínez, quien tras una falla en el gol de la visita, supo acomodarse en el partido y terminó siendo una figura clave para la victoria del Pincha, como también el gran nivel que mostró arriba Martín Batallini y el siempre peligroso Brian Gómez.
Párrafo aparte para Diego Torres, el Ove fue la gran figura con dos goles y el cerebro en cada acción de peligro para Estudiantes. Hoy en día, es el goleador de Estudiantes con 3 goles en el torneo.
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